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2 de noviembre de 2011

Wikipedia

Añadida información a la página Litiasis Biliar

Poesías

Se empaña mi mirada al pensar en lo que me deparará el mañana, sin ti. 

No hay lluvia que supere mi llanto, la felicidad me cuesta descrifrarla si no es a tu lado.

Busco y no te encuentro, perdí el mapa que había en mi corazón, 

no sé cuáles son tus coordenadas, por eso hoy te invento. 

Es un tormento el llevarte dentro y no tenerte,


condenado a quererte en tu ausencia hasta el día de mi muerte. 

Entre tú y yo se levantó un muro del silencio,

hoy somos dos desconocidos con un pálpito que late en el olvido. 

Sonrío, a pesar de ser una gota de lluvia que se perdió en un río. 

Momentos mágicos se escaparon del tic-tac de este reloj. 


Sueño con una despedida, ya que te marchaste sin decir adiós.

Tus caricias son las sustancias que le faltan a este cuerpo. 

Se apagó el fuego de esta mirada sin dejar cenizas. 

El amor siempre se va y cuando entra no te avisa. 

Bajo el fondo de una noche donde perdí el olor de tu risa 

harto de andar fingiendo una sonrisa, 

harto de soñar en ti y no poderte tocar.

Todo será diferente mañana, 

otro rayo de sol entrará por mi ventana 

y quizás me levantaré sin ganas de pensar en una esperanza que no vendrá, 

en una ilusión que jamás se va a realizar. 

Cae la lluvia y sólo quiero besar tus pasos. 

Te tendré en mi corazón hasta que pueda tenerte entre mis brazos.

Pelicula

¿Qué ocurre cuando nos enamoramos?
Como resultado de ciertos estímulos, el hipotálamo libera una potente descarga de morfinas, pero... ¿porqué esa mujer o ese hombre? ¿Hay una emisión de feromonas que corresponde a una señal genética complemetaria o son unos rasgos físicos que reconocemos: los ojos de una madre, un aroma que estimula un recuerdo feliz? ¿Es el amor arte de un plan? ¿Un inmenso plan entre dos modos de reprodución? Las bacterias y los virus son organismos asexuados. Con cada división celular, cada multiplicación, mutan y se prefeccionan mucho más deprisa que nosotros. Contra esto respondemos con el arma más temible, el sexo. Dos individuos, al mezclar sus genes, barajan las cartas y crean otro individuo que resiste mejor a los virus cuanto más diferentes sean. Entonces, ¿participamos sin saberlo en una guerra entre dos modos de reprodución?